1. | 1 Pierna de cordero mediana |
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2. | 12 Escalonias |
3. | 2 Ristras de tomates cereza |
4. | 3 Ramitas de tomillo |
5. | 1 Vaso de vino blanco |
6. | 5 Cucharadas de aceite de oliva |
7. | Sal Al Gusto |
8. | Pimienta al gusto |
1. Precalienta el horno a 210°. Haz tres o cuatro cortes paralelos en la parte superior de la
pierna de cordero e introduce en cada uno una ramita de tomillo. Salpimiéntala y colócala sobre la
bandeja del horno.
2. Lava los tomates y retírales el rabito; pela las escalonias. Distribuye los dos
ingredientes en la fuente, alrededor de la pierna, y riégalo todo con aceite de oliva. Introduce la
fuente en el horno y asa la carne durante 15 minutos.
3. Vierte en la fuente el vino blanco y un poco de agua, baja la temperatura del horno a 180°
y continúa la cocción durante 30 minutos, dando la vuelta a la carne un par de veces y regándola de
vez en cuando con los jugos de la fuente.
4. Acabada la cocción, dispón la pierna asada en una fuente de servir, distribuye alrededor
los tomatitos y las escalonias, y riégalo todo con unas cucharadas de jugo de cocción. Sirve bien
caliente.